Los sueños de Dios surgen en nuestro corazón por causa de nuestra relación íntima con Él y siempre su deseo es que soñemos y visionemos con Él, y nos enfoquemos en lo que Él quiere para nuestro ahora y nuestro futuro eterno. (Esta serie contiene solo 1 estudio )
top of page
bottom of page
Comments